Chantaje y presiones. Este es el lema adoptado por el DRS en la víspera del juicio de varios miembros del Polisario y de oficiales argelinos, el 12 de agosto, ante la Audiencia Nacional en Madrid, máximo tribunal penal Español.
La determinación de la DRS aparece como un resplandor en la salva de artículos publicados por los periódicos argelinos. La instrucción dada es intensificar la presión contra España, incluso recurrir al chantaje y las amenazas en contra de los intereses del paíse ibérico en Argelia. Un periódico argelino incluso encontró más honesto de jugar limpio con Madrid escribiendo sin rodeos: «Se teme que cuando España aumente sus empresas para que arranquen lucrativos contratos en Argelia, las autoridades de Argel hagan conocer a sus homólogos de Madrid que los juicios políticos de la Audiencia Nacional, de injerencias forma parte de una conspiración que España en crisis podría ignorar «. De hecho, la irritación de los oficiales de alto rango de la inteligencia militar argelina está bastante justificada. En este juicio sin precedentes, la justicia española está a punto de juzgar a no menos de 29, responsables del Frente Polisario y los oficiales argelinos del DRS. Los cargos también son muy pesados: Tortura, desapariciones forzadas, detenciones ilegales y graves violaciones de los derechos humanos. Y las víctimas son opositores saharauis que han sufrido este tipo de violencia en los campamentos de Tinduf, bajo el control del Frente Polisario apoyado por Argelia que lucha contra Marruecos por la independencia del Sáhara Occidental.
La ira es aún mayor ya que entre los acusados figuran responsables influyentes del Polisario, entre ellos Mohamed Jandoud, el mismisimo representante de los separatistas en España, su predecesor Brahim Ghali, actual representante del Polisario en Argel y muchos otros. No se necesita mucho para hacer decir a un diario que «sólo necesita el presidente Mohamed Abdelaziz para que la más alta corte de justicia en España, la Audiencia Nacional, juzgue toda la clase política resistente.» La frustración es tal que el periódico no ha dudado en titular: «La justicia española abusada por Marruecos».