El jefe del Polisario Mohamed Abdelaziz entró en una histeria indescriptible después de la filtración de información confidencial sobre la adquisicion por el DRS argelino de material de vigilancia muy sotisficado, para reforzar el control sobre los campamentos saharauis de Tinduf.
Según fuentes bien informadas en en el cuartel general del Polisario, el líder del Frente ha sido puesto al corriente desde hace varias semanas ya del plan de vigilancia concoctado por los servicios de inteligencia militar argelina. También estaba al corriente del gran lote recibido. Se trata de una tecnología de control térmico avanzado para debiendo servir para sellar de manera hermética los diferentes campamentos saharauis. Una operación convertida en necesaria, de acuerdo con los argumentos del DRS, por la necesidad de protegerse contra la intrusión de muchos elementos «incontrolados». La toma de rehenes españoles y una italiana en octubre de 2011 en el interior mismo de la sede del Polisario en Argelia, es sólo el episodio más conocido ya que implica cautivos occidentales. Muchas otras operaciones menos conocidas ocurren regularmente e involucran a elementos del Polisario que participan en diversos tràficos. El tráfico de de cigarrillos y drogas a la implicacion en las redes de traficantes de inmigrantes , a través de conexiones con grupos terroristas que deambulan por las zonas desérticas del Sahara y el Sahel.
Acostumbrados a los hechos consumados del DRS, el líder del Polisario no exigio explicaciones. No planteo para nada objeciones a las restricciones que dicha vigilancia impondría inevitablemente a todos los saharauis de Tinduf, en términos de libertad de circulación y de tránsito. Lo que más temía era la filtración de esta información que podría empañar aún más su ya frágil imagen en Tinduf. Una fuga que sólo confirma la creencia de la mayoría de los saharauis que viven en los campamentos argelinos, que el jefe del Polisario y sus principales lugartenientes son sólo marionetas en manos del DRS.