Argelia hace decididamente fuego de toda leña para cubrir los reveses diplomáticos sucesivos del Polisario, hasta el punto de que los diplomáticos argelinos trataron sin éxito de travestir los hechos haciendo creer que Zambia no ha retirado su reconocimiento de la teorica República Saharaui.

Fuentes informadas en Lusaka indican que diplomáticos argelinos sobornaron a un oscuro funcionario para poner en duda las declaraciones del canciller Harry kalaba. Pero no hay rastro de la declaración de este misterioso agente en cualquier declaración o documento oficial del gobierno de Zambia.

Esta maniobra de Argelia sigue a la declaración, verdadera ésta, del jefe de la diplomacia de Zambia en la que reiteró su declaración hecha el 9 de julio en Rabat. Harry kalaba había anunciado la retirada de Zambia de su reconocimiento a la RASD, la república autoproclamada por el Polisario, pero no reconocida por la ONU.

El ministro de Asuntos Exteriores de Zambia había aclarado las cosas: «Zambia apoya los esfuerzos de las Naciones Unidas para lograr una solución definitiva al diferendo regional sobre el Sahara». Harry kalaba que asegura que su país quiere «contribuir de manera constructiva a estos esfuerzos a través de una postura neutral abierta sobre las partes interesadas y mantener un diálogo activo.»

«Por lo tanto, reafirmo la posición de Zambia,» insistió Harry kalaba, asegurando que Zambia «considera que el retorno de Marruecos a la Unión Africana es una oportunidad para que la familia continental para traer este tema, que sólo ha durado demasiado tiempo, hacia una solución amistosa en el espíritu africano del consenso, el diálogo y el respeto mutuo».

En África, las cosas están cambiando demasiado rápido para el régimen argelino. Tras el regreso de Marruecos a la UA, que ahora se torna hacia la CEDEAO. Y es el pánico en Argel que siempre había apostado sobre el aislamiento del Reino.