El régimen argelino no suelta prenda. En 40 años, ha desembolsado una pesada factura estimada en más de 250 mil millones de dolares para financiar su greña diplomática contra el vecino Marruecos sobre el Sáhara Occidental.
Este despilfaro y ese ensañamiento contra el Reino de Marruecos, se explica, según los observadores, por la naturaleza del poder al mando en Argel que no ha cambiado desde la época del difunto Huari Bumediene.
Oficialmente los dirigentes argelinos proclaman la neutralidad de su país en el conflicto entre Marruecos y el Frente Polisario. Pero sobre el terreno, una gran cantidad de evidencia física y pistas demuestràn la implicación directa de Argelia en està interminable disputa territorial.
¿Si no cómo explicar el hecho de que el régimen argelino se presenta en un celoso defensor de «causas justas de los pueblos oprimidos,» pero al mismo tiempo, prohíbe con el uso de la fuerza, los mismos derechos a su poblacion cabildea y Mozabite a la autodeterminación (lingüística, cultural y política).
Recientemente, la ciudad argelina de Burmerdès organizó un sea dicho » Universidad de verano de los cuadros del Frente Polisario», a la cuàl se invitó a más de 500 separatistas, incluyendo a cincuenta del interior del Sahara Occidental.
A su regreso a Marruecos, la Aduana marroquí confiscó en sus equipajes, banderas argelinas, banderas del Polisario, folletos de propaganda, uniformes del ejército argelino, dinero en divisas, etc … Material que no deja ninguna duda acerca de las verdaderas intenciones de sus patrocinadores y supervisores.
Por otra parte, muchos altos responsables argelinos no esconden su apoyo al Polisario y proclaman su hostilidad anti-marroquí. Algunos responsables incluso han declarado públicamente y en repetidas ocasiones que la cuestión del Sahara Occidental era una prioridad de su diplomacia exterior.
Como la riqueza del petróleo fluye libremente y que las cajas negras del ejército y del DRS (inteligencia militar) no se han secado, los gobernantes de Argel no bajarán la guardia. En su lugar, dicen los observadores, siempre que es la oligarquía político-militar que dirige el país, Argelia continuará sus maniobras en forma de diplomacia entre bastidores y de lobbies, y seguirá en albergar, en financiar y a formar los dirigentes y las milicias del Polisario.