De acuerdo con una fuente cercana del mando del Frente Polisario, el enfrentamiento con la MINURSO estaria en vias de dar un paso más con la confiscación de equipos de telecomunicaciones de los soldados de la fuerza de la ONU. Un serio enfrentamiento se produjo en el aeropuerto de Tinduf el pasado viernes, donde tres miembros de alto rango de la MINURSO llegaron para protestar después de que un oficial de las fuerzas de paz haya sido impedido de viajar un dia antes con su equipo de transmisión. El jefe de la policía del aeropuerto y un representante del Protocolo Argelino se han reunido con la MINURSO para explicarles que sus militares y representantes no deberàn màs «llevar equipos de telecomunicaciones, o cámaras , por un período indefinido.»
Argumentando que esto constituye un ataque muy grave contra la libertad de movimiento y de los privilegios diplomáticos que recaen a la misión de la ONU, los responsables de la MINURSO han tratado de hacer entrar en razon al Polisario asi como a las autoridades argelinas, pero en vano, éstos ultimos acamparon sobre sus posiciones.

La causa de éste repliegue avanzado por varios expertos y observadores bien informados del caso radica en el intento por parte del Polisario de «proteger» el retorno de los mercenarios saharauis que oficiaban junto a Muammar Gaddafi, y tratan de ocultar algo de tráfico «relacionado» que se ha desarrollado al margen de la revolución libia, y en el que altos cargos del Frente Polisario, entre ellos el coronel Ueld Laakik estaria también implicado, especialmente en todo lo relacionado con el tráfico de armas. Otro evento muy importante que ha puesto la mosca en el oído de los investigadores de la MINURSO y que les preocupa acerca de un posible fuerte deterioro marcado de las relaciones con el movimiento independentista: la desconexión de Bashir Miara, uno de los directores adjuntos de la policía del Polisario fuertemente sospechoso de estar implicado en el tráfico de drogas con Malí. Recientemente, Miara fue visto con tres hombres con pasamontañas que se negaron a que la MINURSO tomase imágenes en torno a los campamentos. La confiscación de los equipos de telecomunicaciones de la MINURSO sigue la prohibición hecha a las fuerza de la ONU para patrullar sin el » equipo apadrinamiento» del Polisario, asi como la prohibición de tomar fotografías, armas que son esenciales para el mantenimiento de la paz.