Los dirigentes del Frente Polisario, tiene mil razones para preocuparse por el futuro inmediato incierto. Algunos duros del movimiento separatista que buscan como medida de precaución, obtener asilo político en un país seguro. El miedo de estos líderes está motivado por el creciente número de países y personalidades que los abandonan a un ritmo inusitado. El jefe del Polisario y sus más cercanos colaboradores mostraron grandes esperanzas en la llegada al poder del Partido Popular español de Mariano Rajoy y, especialmente, del Partido Socialista en Francia, dos aliados claves del ex movimiento saharaui en la UE. Pero pronto iban a ser profundamente consternados por la alineación de la nueva dirección dirigente en París y en Madrid sobre la posición de Marruecos que propone autonomía extendida como una solución al conflicto del Sáhara Occidental.
Este domingo, otra decepción les esperaba por parte del hexágono. Después de la muerte en noviembre de 2011, de Danielle Mitterrand, que en su vida era, una incansable activista por la causa de los separatistas saharauis, otro firme defensor de las tesis del Polisario a la Asamblea Nacional francesa y el Parlamento Europeo, el diputado comunista Jean-Paul Lecoq ha perdido su escaño como miembro de la circunscripción en Seine Maritime. La noticia fue vista como una onda de choque en las maniobras de Mohamed Abdelaziz, que acaba de regresar a su cuartel general en Rabuni, después de una misión en Italia. Al conocer la noticia, dice un viejo saharaui en los campamentos, Abdelaziz golpeo fuerte sobre su escritorio clamando en voz alta «seguramente alguien nos ha echado un maleficio», antes de pedir a sus principales asesores, con voz enojada, de salir y dejarlo solo en su oficina.
Lo que más enfurece al líder del Polisario y sus lugartenientes, dijo la misma fuente instalada en Rabuni, es la pérdida de peso de la ayuda internacional que tenian la costumbre de recibir regularmente de España y Francia. Hoy en día, aunque Jadiya Hamdi, la esposa de Abdelaziz, quién se encargaba, se queja de regresar con las manos vacías estos últimos seis meses, cada vez que se va de viaje al extranjero.
Sé el primero en comentar en «Mohamed Abdelaziz, se queja de la «mala suerte», lanzada al Frente Polisario»