Wikileaks, o la mayor filtracion de documentos diplomáticos de la historia habra por lo menos tenido el mérito de clarificar las posiciones de los beligerantes en los conflictos de baja intensidad que se producen en el mundo, entre ellos el de Sáhara Occidental. Sobre éste último, uno se da cuenta progresivamente a medida que cada protagonista juega en una partición privada muy diferente de lo que expone al público. En cuanto al Frente Polisario, la cuestión de la emergencia de un eje de AQMI-Tinduf es más una cuestión de conjeturas o suposiciones, ya que una nota de la Embajada de EE.UU. en Argel, con fecha del 16 de diciembre del  2009 –o sea menos de un año, informó que el gobierno argelino había descubierto «3 o 4 vehículos 4×4 que creía que estabán destinados al transporte de mercancías entre Mauritania y una retabase de AQMI al sur de Tinduf . La nota estipula que la dirección del Frente Polisario, está tratando de combatir el aumento de los yihadistas en los campamentos «censurando el acceso a sitios web islamistas.»

Este documento, que ofrece gran detalle sobre las dificultades que tienen la dirección oficial del Frente Polisario y Argelia para contener el auge de ideologías extremistas islámicas en los campamentos de Tinduf, capta la magnitud del desafío. De hecho, es en parte porque la diplomàcia de los EE.UU. juzga que el riesgo de contaminación  del Frente Polisario por AQMI es un reto muy importante a relevar que sí habría proporcionado asistencia «técnica» a Argelia mediante el envío de aviones espías sobre sus fronteras del sur …