Esto hace màs de dos años que habia desaparecido de las pantallas radar, pero su sombra seguia planeando ejerciendo un peso sobre las relaciones Maroco-Argelinas. Larbi Belkheir, aquel qui « susurràba » en la oreja de diferentes presidentes Argelinos desde hace cerca de 30 años, y uno de los principales « janviéristes »(eneristas), y no està desde el pasado jueves.
En términos simbolicos como operativos, està desaparicion tiene arranques importantes sobre el dossier del Sàhara Occidental, ya que es el hombre que ha participado a los principales avances en los acercamientos anteriores entre Marruecos y Argelia que ha muerto. Belkheir, a pesar de lo que se ha podido escribir, no se aburria en rabat y tomaba muy en serio su papel de embajador. Sin respiro, habia intentado reanudar los hilos del diàlogo, de recrear pasarelas entre el amo del Palacio de la Muradia y el Rey de Marruecos. Cansado, la caida de su influencia para con el primer circulo, conjugada al embargo de la segurida militar argelina sobre el dossier de las relaciones bilaterales Marruecos-Argelia, habria tenido razon de su voluntarismo y de sus diferentes tentativas, hayan sido publicas o màs… discretas.

Sobre el frente interior argelino, la muerte de Larbi Belkheir- personaje a mitad de camino entre Fouche y Talleyrand, a quién se presto una responsabilidad considerable en todos los acontecimientos importantes de la argelia contemporanea, significa igualmente que el clàn de los que pregonizaban un diàlogo con Marruecos està definitivamente fuera de carrera. Pero, este dato es capital para poder comprender las evoluciones futuras de Argelia. Sin ningun contra-poder, y con un Presidente debilitado por los recientes escàndalos de corrupcion de su circulo (como por arte de màgia !) la seguridad militar, a su cabeza el general Mohammed Mediène (alias Tufik), es en adelante la unica en determinar la marcha del pais, y es ella la que designara el futuro candidato a la eleccion presidencial… un tal Ahmed Uayahia. El dossier del Sàhara và, al parecer, hundirse en los bancos de arena de la manipulacion habitual de los servicios argelinos. La mayor fuerza del demonio es hacer créer que no existe !