El Polisario y Argelia fueron particularmente sacudidos sobre todo las dos últimas semanas en el plano diplomático sobre uno de los problemas que más les aquejan, el plan de autonomía del Sahara presentada por Marruecos, que reúne el apoyo internacional que no se menosprecia.

Ante la cuarta Comisión de la Asamblea General de la ONU reunida en Nueva York, los países del Golfo y muchos países de África y América Latina apoyaron firmemente el plan de autonomía, calificado como una base sólida debiendo servir para poner fin al conflicto regional sobre el Sahara.

Asi, Manal Redouane, la representante de Arabia Saudita ante la ONU, recordó la firme posición de los países del CCG que apoyan a Marruecos y la iniciativa de autonomía en el Sáhara. La embajadora saudí recuerda en este sentido la «Declaración de Riad», adoptada en abril de 2016 en la primera cumbre que reunió a Marruecos y los países del CCG.

Para la diplomática saudí, el plan de autonomía es un «paso constructivo» y una «solución de compromiso, de conformidad con el derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU.»

La posición de Riad, que fue confirmada por otros países del CCG, así como por Jordania, recibió el mismo apoyo de muchos países africanos y los países latinoamericanos, cuyos representantes hablaron ante la cuarta Comisión de la Junta General.

Mientras tanto, el jefe de la diplomacia francesa, Jean-Yves Le Drian, volvió a hablar el lunes en Rabat sobre el plan de autonomía, que Francia apoya con la lucidez de la antigua potencia colonial en la región, el hecho de los orígenes de el asunto del Sahara y sus cuestiones del Magreb.
«La postura de Francia es permanente» sobre el tema, insistió el ministro francés, recordando que Francia «ya había declarado que el plan de autonomía iniciado por Marruecos era una buena base para las negociaciones». Francia considera que «el Secretario General de las Naciones Unidas puede tener la oportunidad, desde esta base, de tomar las iniciativas necesarias», concluyó Jean-Yves Le Drian.