No existe solo el evento del Foro de Crans Montana en la ciudad de Dakhla, en el Sahara, que preocupa al Polisario en los últimos días, debido al impacto de los medios de comunicación internacional del foro organizado por la famosa ONG suiza, dice una fuente bien informada en los campamentos de Tinduf. Los amigos de Mohammed Abdelaziz están igualmente preocupados por el apoyo decisivo dado por Rusia a Marruecos con motivo de la visita del rey Mohammed VI a Moscú.

En una declaración emitida después de la reunión de Putin-Mohammed VI en el Kremlin el martes dijo que Rusia «tiene debidamente en cuenta la posición de Marruecos» en la solución de la cuestión del Sahara. Por otra parte, en respuesta a lo que Ban Ki-Moon, que ha utilizado por primera vez en los anales de las Naciones Unidas, el término «ocupación» para describir la situación en el Sahara, Rabat y Moscú fueron categóricos. «Rusia y Marruecos no apoyan ninguna tentativa de acelerar o precipitar la continuación del proceso político» dirigido por las Naciones Unidas, subraya la declaración conjunta.

Este valioso apoyo de Rusia se añade al de Francia, otro miembro permanente del Consejo de Seguridad, en que el plan de autonomía propuesto por Marruecos es una «base seria y creíble» para una solución negociada a la cuestión de sahara. Un desarrollo del Ministerio de Asuntos Exteriores francés, publicado justo después del derrape de, Ban Ki-Moon, ha reformulado definitivamente el debate. La cuestión del Sahara «es objeto de una mediación de la ONU, que Francia apoya dentro de los parámetros establecidos por el Consejo de Seguridad.»

La posición de Francia en el conflicto regional en el Sahara, que envenena las relaciones entre Marruecos y Argelia durante cuatro décadas, era conocida desde hace mucho tiempo. Por contra, las aclaraciones de Moscú tuvieron el efecto de una ducha de agua fría sobre el Polisario. A tal punto que los dirigentes del Frente separatista apoyado por Argelia están preocupados de que la tensión actual entre Marruecos y Ban Ki-Moon, que pensarón ser en su propio beneficio, no sea que un accidente que, por el contrario, permita a Marruecos de ampliar el círculo de sus aliados, dice nuestra fuente.