Ban Ki-Moon, recordará durante mucho tiempo su gira por la región del Magreb que ha tendido a varios miembros del Consejo de Seguridad, irritados de que el secretario general de la ONU se deje manipular por el Polisario y Argelia.

Al tomar la iniciativa para tratar de relanzar el proceso de solución de la cuestión del sahara occidental, Ban Ki-Moon se hizo precipitadamente abogado del Polisario, lamentaron. Fuentes informadas en el meollo de las Naciones Unidas en Nueva York también han revelado que varios países miembros del Consejo de Seguridad se sintieron decepcionados por la actitud del secretario general, que se tomo un foto junto a la bandera de la República Saharaui revindicada por el Polisario.

Una actitud por menos incomprensible cuando ningún miembro permanente de los países del Consejo de Seguridad y, en general, ningúna capital importante en el mundo reconoce a la República proclamada por el Frente Polisario y Argelia.

Por otro lado, no sólo no hizo la menor alusión al censo de población en los campamentos de Tinduf, tal como fue recomendado por el Consejo de Seguridad, sino que Ban Ki-Moon ha ido aún más lejos en su sesgo.

Evitó cuidadosamente hablar sobre el plan de autonomía puesto sobre la mesa por parte de Marruecos, mientras que esta propuesta concreta sin embargo, ha sido calificado por el Consejo de Seguridad de oferta»seria y creíble» como base para una solución final de la cuestión del Sahara.

Los miembros del Consejo de Seguridad están preocupados de que esta actitud sesgada podría menoscabar la función del secretario general de la ONU en el conflicto, cuando Ban Ki-Moon, tiene que dejar su cargo en diciembre de 2016. Sobre todo porque este papel implica la neutralidad del mediador para avanzar en el proceso de resolución de conflictos, y todos sabemos que los hilos son movidos por Argelia y donde el Polisario, solo sirve de pantalla.