Elementos del Polisario inmérgen de nuevo en un asunto de drogas en la frontera entre Malí y Argelia. Una pelea entre clanes tuvo lugar en la noche del sábado al domingo, en un pueblo pequeño desértico entre el norte de Malí y el extremo sur de Algeria. Una unidad compuesta por varios miembros armados del Polisario,fue enviadad a Rabuni por el jefe del movimiento independentista saharaui, Mohamed Abdelaziz para ir allí, y liberar cueste lo que cueste, un funcionario civil y dos militares del Frente Polisario, tomados como rehenes por un grupo de traficantes de drogas con base en el límite de la frontera entre Argelia y Malí. Los tres dirigentes del Frente Polisario «secuestrados» en un lugar no identificado, son acusados por los grupos de narcotraficantes procedentes de Malí y Níger de haber querido robar un botin de droga de cerca de una una tonelada de cannabis (hachís) y de cocaína. Según la información recogida en Tombuctú (norte de Malí), la intervención de los elementos del Polisario ha ido mal ya que desde su llegada allí, fueron recibidos a tiros por los traficantes Malíénses y Nigerianos, armados hasta los dientes. El nutrido tiroteo que se desató entre las dos partes hizo, según un responsable local, por lo menos cuatro muertos y varios heridos.

La batalla aún continuaba el lunes «en la frontera entre Malí y Argelia, entre el grupo armado compuesto de traficantes de drogas de Malí y Níger, y el otro grupo armado cercano al Frente Polisario», confirmó la agencia de prensa fràncesa «AFP», citando a un asesor del gobernador de Tombuctú.
Los elementos del Polisario llegados para liberar los suyos de manos de sus captores estaban armados con armas ligeras y viajaban a bordo de Land-Rover de color verde militar.
Las personas fallecidas, precisa la AFP citàndo las mismas fuentes, son traficàntes de Malíénses, Nigerianos y del Frente Polisario que no han logrado ponerse de acuerdo sobre «la venta de una tonelada de droga» y compartir el botín.
Varios elementos que desertaron del Polisario, se convirtieron en traficantes, algunos de los cuales se han unido a la rama magrebí de Al Qaeda (AQMI), que opera en la banda del Sahel de Mauritania a Níger, pasando por Malí y Argelia.
Actualmente no se dispone de información sobre el número exacto de las víctimas de ésta lucha, ni el lugar de su desarrollo y las eventuales detenciones entre los miembros de grupos de traficantes.
Esta región también se ha convertido en un centro de tráfico de todo tipo, incluidas armas y drogas blandas y duras que pasan por Malí en dirección de Libia a través de Níger, Chad o en direccion de Marruecos y Argelia, pasàndo por el sur de Argelia y el Sáhara Occidental.