Incluso en ausencia de revendicacion de su secuestro, los dos franceses raptados el 24 de noviembre en Hombori, en el noreste de Mali, han sido efectivamente secuestrados a cuenta de AQMI. Fuentes de seguridad Maliénses han confirmado que dos malienses y elementos llegados de los campamentos del Polisario en Argelia están involucrados en el secuestro. El secuestro de los dos francés en su hotel por  hombres armados que los llevaron a un lugar desconocido, puso en alerta los servicios de inteligencia occidentales. Especialmente cuàndo el secuestro ha sido seguido al día siguiente en Tombuctú, también en el norte de Malí, por el secuestro de tres otros europeos y el asesinato a sangre fría de un turista alemán que trató de resistirse a sus captores. Y todavía ninguna revendicacion. Exactamente el mismo modus operandi como el secuestro de los tres occidentales,el 23 de octubre en el cuartel general del Frente Polisario en Argelia. Todos estos secuestros han hecho pensar a los servicios de seguridad de Malí y Níger, así como a sus homólogos occidentales, que los autores de éstas operaciones no son combatientes de AQMI. La Pista de la subcontrata de las operaciones de Mali a favor AQMI es la más retenida.

Esto, sobre todo porque la investigación sobre el secuestro de dos humanitarios españoles y su colega italiana, reveló la complicidad de elementos del Frente Polisario, que luchan con el apoyo de Argelia, para la independencia de la región Sáhara Occidental. Las conexiones entre los elementos del Polisario y AQMI se han reforzado con el desarrollo de todas las formas de tràfico en la región. El tráfico de drogas en América Latina transitando via África del oeste, la proliferación de las armas de los arsenales de Gadafi, el seguimiento del movimiento de los ejércitos de la región y la toma de rehenes occidentales se ha convertido en un negocio muy lucrativo donde todo el mundo encuentra su cuenta.