Según una fuente bien informada en Tinduf, el lanzamiento por parte de Marruecos de un satélite de observación espacial ha sonado a conmoción en las filas del Polisario, cuyos dirigentes están entrando en pánico ante la idea de ser puestos bajo supervisión en su sede en Tinduf, Argelia.
El temor del jefe del Polisario Brahim Ghali es ver Marruecos ahora capaz de escrutar cada abuso cometido por sus milicias contra los saharauis opuestos al Polisario en los campamentos de Tinduf. Si Marruecos logra tener clichés sobre el abuso y el trato inhumano de la población saharaui en los campamentos, tendrá un arma diplomática difícil de cuestionar. Rabat no dudará en usarla contra el Polisario en foros internacionales.
Pero el terror no ha afectado únicamente a los dirigentes del Polisario. Los generales argelinos están aterrorizados ante la idea de ver a su vecino tener un medio ultra-sofisticado de vigilancia de fronteras desde el espacio. Sobre todo que el satélite será administrado y dirigido 100% por Marruecos desde un centro terrestre cerca de la capital, Rabat.
Aunque cualquier satélite puede realizar múltiples misiones, Marruecos ha asegurado que la nave espacial está destinada principalmente a objetivos civiles, en particular la observación de los cambios ambientales, los recursos de aguas subterráneas, los recursos pesqueros, etc.
Sin embargo, el régimen argelino no esta tranquilizado por los anuncios calmantes de Marruecos. En Argel, los generales rápidamente hicieron el despliegue de los dispositivos militares. Esto, junto con la amargura de haberse lanzado de cabeza en una loca carrera armamentística que ha costado decenas de miles de millones de petrodólares en la compra de armas, que se encuentran ahora a la vista del satélite marroquí.