El rey Mohammed VI puso en aprieto a la direccion del Polisario el martes, ignorando totalmente el frente separatista y anunciando la disposición de Marruecos para un «diálogo directo y franco con Argelia», insistiendo sobre una solucion politica de compromiso, duradero y realista en el Sahara, que se inscriba en la Iniciativa de Autonomía.
Para concretar este diálogo, el soberano marroquí ha propuesto a Argelia la creación de un mecanismo político conjunto de consertacion, que tendra por objetivo abordar a corto plazo las disputas conjuncturales y objetivas en las relaciones marroquí-argelinas.
En un discurso con motivo del 43 aniversario de la Marcha Verde, el Rey Mohammed VI explicó que este acercamiento también debería servir para el desarrollo del Magreb.
En cuanto al Sahara, Marruecos continuará sus esfuerzos para asegurar el desarrollo de sus provincias del sur, en el marco del nuevo modelo de desarrollo, continuó el Rey Mohammed VI, para quién el Sahara marroquí renovará su vocación milenaria como un vínculo entre Marruecos y su profundidad africana.
Otro punto que ha incomodado a Brahim Ghali y sus lugartenientes del Polisario, la confirmación por parte del Soberano Marroquí de que la implementación operativa de la regionalización avanzada contribuye al surgimiento de una verdadera élite política, que garantiza una representación democrática efectiva de los habitantes del Sahara.
Una representación que se realiza en un clima de libertad y estabilidad, y que coloca a los habitantes del Sahara en la capacidad de ejercer su derecho a una administración autónoma de sus asuntos locales y un desarrollo integrado de su región.